domingo, 31 de agosto de 2014

Capitulo 114



Cuenta Pedro:

La felicidad que pasaba por mi cuerpo era inexplicable. Escuchar el llanto de nuestro hijo y verle la carita cuando lo apoyaron en el pecho de Paula llenaron mi alma. Iluminaron mi mundo por completo y todo mí alrededor paso a un segundo plano.


Mientras terminaban a Paula, Marta junto con el equipo comenzaron a limpiar y aspirar bien a nuestro hijo.

Luego nos dirigimos a otra habitación, para pesarlo, medirlo y hacerle todos los controles necesarios.

Mientras yo miraba como le hacían todos los controles una sonrisa se dibujó en mi rostro al escuchar la pregunta de Marta.

Le tengo que poner la pulsera, tiene nombre ya? –

Sí, yo creo que sí, definitivamente él es Thiago Alfonso – mientras sonreía y acariciaba su manito –

Hermoso nombre – me sonrió mientras lo colocaba en la balanza –

No no llores hijito tranquilo mi amor –

Quiere ir con su mama y su papa por eso llora –

Cuánto pesa? –

2,770 kg –

Es chiquito mi campeón –

Muy chiquito, pero está muy sano, así que no te preocupes –

Bueno ahora si chiquito vamos a vestirte y ya vas a poder ir a la habitación con tu mama y tu papa – Marta le sonreía y lo vestía con mucha dulzura –


Bueno ahora si Pedro, ya lo podes llevar lo envolvemos con la manta y los dejo libres –

Le podemos agregar este babero? –

Claro que si – dijo sonriendo al ver la inscripción que tenía –


Luego de colocárselo y entregármelo envuelto en su manta, con él en mi pecho me dirigí feliz a la habitación a encontrarnos con Pau.


Permiso… vinimos a estar con la mama más linda –

Mi amor, por fin – sonrió al vernos –

Que linda estas –  besándola – lo pesaron y le hicieron todos los controles por eso tardamos, tengo en mis brazos 2,770 kg de puro amor

Hola mi amor, veni con mama, sos muy chiquito –

Hola mama, papa me eligió el nombre espero que no te enojes – dije riendo –

A ver si coincidimos en el nombre que pensé que íbamos a elegir – sonrió mirando su pulsera –

Estoy seguro que sí, porque es su nombre, no hay dudas –

Claro que si mi amor, es Thiago sin dudas – beso mis labios –

Como te sentís? –

Cansada, pero estoy feliz mi amor –

Me parece que alguien quiere teta – reí – mira cómo se mete la manito en la boca –

A ver hijito… vamos a aprender entre los dos – sonrió y despacito intento prenderlo –

Vos podes campeón – sonreí –

Ahí agarro – dijo sonriendo y su cara se ilumino. Si había algo que le preocupaba era no poder dar de mamar –

No te la adueñes, que solo te la presto por un tiempo enano eh – sonreí –

No le digas eso gordo – rio –

Estas tan hermosa mi amor, tenes una paz en la cara – mientras le acariciaba la mejilla – no parece que acabas de parir

Tampoco para tanto gordo, no quiero ni imaginarme la cara que tengo –

Shh, sonreí para la foto que quiero tener este recuerdo –

Me parece que alguien esta prendido a la teta sin tomar – dijo sonriendo – me está usando de chupete

Mmm que feo eso hijito – bese su piecito –

Le voy a hacer el provechito –

Pero abrile un poco la manta amor, siento que está muy apretujado me parece –

Tenes razón – sonrió –



La milésima de segundo que Paula tardo en abrirle la manta a Thiago, y ver el babero con la inscripción que tenía, mi mundo se paró y mi corazón comenzó a latir rápidamente.

Paula no se movía, estaba con sus ojos fijos en el babero, hasta que vi que las lágrimas comenzaron a caer por su rostro.

Lo que en este momento ella estaba leyendo, era la pregunta más importante que había hecho en mi vida.

“¿Te queres casar con Papa?”



Coloco a Thiago en su hombro y comenzó a hacerle el provechito mientras las lágrimas aumentaban y me miraba sonriendo.

Con paso lento y nervioso me acerque a ella y comencé a acariciar su mejilla nuevamente. No llores mi amor… -

Como no voy a llorar?, es la pregunta más hermosa que podrías haberme hecho un día como hoy, te amo con toda mi alma, y la respuesta es más que clara –

Si? No se… - dije riendo –

Sos un tontito, acércate –

Que amor – me acerque a su boca –

Si quiero, te amo – beso mis labios con dulzura – si hijito, quiero casarme con tu papa – volvió a sonreír mientras lo acomodaba entre sus brazos totalmente dormido y relajado –

Este era el regalo que me daba la pulsera no? – sonrió volviendo a besarme –

Si… aunque faltaban unos días para completarla, para mí se completa hoy, con la llegada de Toto –

Toto? – Sonrió – que hermoso sobrenombre

Estira el brazo amor, - de mi morral, saque la cajita que contenía el último dije y lo coloque en su pulsera –

Son dos corazoncitos unidos – me miro con los ojos brillosos – es hermoso todo lo que pensaste

Me alegro que te guste – sonreí – cuando lo pensé no estaba seguro de la idea

A mí me encanto, de verdad –

A vos te gusta todo lo que yo hago –

Porque te amo, y todo lo que venga de vos me encanta –

Gracias mi amor –

Avisaste que nació? –

No, ahora aviso, estaba nervioso por la propuesta de casamiento – reí –

Nervioso? Dudaste de la respuesta que te podía llegar a dar? –

No, nunca dudaría, pero igual estaba nervioso –



Sonrió, me beso, y luego de eso, le acomode las almohadas y agarre el celular, para avisarle a toda la familia que ya había llegado Toto.





Y llego el bebe tan esperado, la incognita del nombre y del regalo de la bendita pulsera jajaja. 
Espero que les guste este capitulo. Quedan seis y nos despedimos de "Viendo con el corazon"

viernes, 29 de agosto de 2014

Capitulo 113



Cuenta Paula:

Eran casi las diez de la noche, mis contracciones eran cada vez más pegadas, y el dolor más intenso.

Pedro me acompañaba en todo momento y me contenía, pero no veía la hora de estar completamente dilatada para poder comenzar a pujar y tener mi hijo en brazos.


Luego de usar un poco la pelota como me había dicho Marta, y caminar por el pasillo como me había recomendado, volví a ingresar a la pileta, ya que el dolor había vuelto a ser insoportable.

Al hacerlo, esta vez PP ingreso conmigo, colocándose detrás de mí.



Tranquila mi amor, ya falta menos – acariciaba mi pelo con suavidad –

Me due…le muchísimo –

Ahora va a venir Marta seguro, apreté el botón me pone mal verte así –

Para que… la llamaste –

Porque las contracciones están siendo más pegadas también amor, tranquila –

Ay – dije por lo bajo tratando de concentrarme en respirar mientras apretaba la mano de Pedro –



Permiso… estaba viniendo para acá y me dijeron que justo habías apretado el botón gorda, como estas con el dolor? – Agos –

Mal… me duele cada vez más –

Voy a revisarte a ver si avanzamos con la dilatación, segura que no queres nada para aflojar el dolor –

No… no quiero  nada –

Bueno, respira hondo... estas en siete centímetros Pau, ya falta nada prácticamente –

Bien mi amor -

Esto es lo último, así que concéntrate para las contracciones así las controlas mejor –

Está costando… pero voy a poder – le sonreí acariciando mi panza –

Yo sé que si – me sonrió Agos – los voy a dejar tranquilos si, en un ratito paso porque podes avanzar rápido como lento… no lo sabemos, así que te voy a ir controlando

Gracias Agos – PP –



Luego de un rato, la situación se me torno insostenible, las contracciones eran demasiado pegadas, ya no daba más, pero no podía aflojar ahora.

Llama a Agos, por favor… no doy más gordo –

Tranquila, vos podes amor, no me aflojes ahora –

Ay… siento ganas de… pujar –

No amor, no pujes, ya vienen –

Permiso… - dijo Luciano ingresando – a ver Pau… esta la cabecita, estas completamente dilatada

Va a nacer ahora? – dijo PP emocionado –

s…si Pe..dro –

Tranquila amor no hables –

Ya viene el equipo Pau, cuando sientas la próxima contracción puja –

Aho…ra –

Puja, respira hondo y sostene el aire, la barbilla al pecho –

Dale mi amor, vos podes – sentía las palabras de PP en mi oreja mientras me corría el pelo de la frente con la dulzura que lo caracterizaba –



No sé cuánto llevaba pujando, ya no tenía más fuerzas, pero cuando sentí que ya no podía más toda la habitación se ilumino con el precioso llanto de nuestro hijo.


Sentir su piel con mi piel hizo que mi mundo se parara y mi corazón latiera más rápido.

Los ojos de Pedro llorosos mientras emocionado me besaba completaron la hermosa imagen que estaba teniendo.

Felicitaciones Papis – nos sonrió Luciano – 5 de enero a las 12:30 am – agrego Agos de atrás –

Te amo… - le susurre a Pedro mientras besaba la cabecita de nuestro hijo –

Y yo a ustedes, es hermoso… - sonrió –

Papa queres cortar el cordón? –

Claro que si –


Pau tenemos que llevar al bebe para limpiarlo, pesarlo y revisarlo bien mientras te terminan a vos sabes? –

Puede ir Pedro? –

Si, puede quédate tranquila que no va a estar solo –

Vayan mi amor –

Quédate tranquila que yo lo cuido. Te amo –



Bese a Pedro, y le entregue a nuestro hermoso hijo a Marta para que puedan revisarlo y controlarlo.






Se hizo esperar pero llego el gordito. Espero que les haya gustado el capitulo. Quedan solo 7 capitulos. Gracias por todos los comentarios 

miércoles, 27 de agosto de 2014

Capitulo 112



Cuenta Pedro:


Finalmente había llegado el día. Estaba a punto de ser papa. No tenía palabras para expresar todas las sensaciones que me pasaban por el cuerpo.


Después de que Agos  y Luciano revisaron a Pau, se retiraron de la habitación para dejarnos tranquilos.



Mi amor, estas bien? – dije sentándome en el sillón que estaba a su lado en la cama y agarrándole la mano –

Si… estoy bien, un poco dolorida –

Sos mi leoncita, te la estas bancando muy bien –

Recién empieza esto PP, veremos si tu hijo tarda mucho en salir – dijo sonriendo –

Que feo Chaves, ahora es mi hijo solo? –

No amor – rio bajito – va… si se hace el rebelde si


Permiso papis… - escuchamos mientras la puerta se abría –

Buenas tardes – sonreí –

Buenas tardes, mi nombre es Marta, y los voy a acompañar en todo esto –

Un gus..to mi nombre es Paula –

Lo sé – sonrió y acaricio la cabeza de Paula – vine a preparar la pileta para que te puedas meter, sé que eligieron el parto bajo el agua

Si, si lo elegimos –

Bueno ahora voy a preparar todo, así te podes meter –

Si por favor, controlo mejor el dolor –

Vas a usar medicación o queres hacerlo completamente natural? –

Sin nada… - dijo Paula en un suspiro y yo la mire –

Estas segura amor? Sin nada? –

Sí, me la voy a bancar – sonrió – me das un beso?

Claro que si – bese sus labios acariciando su pelo para transmitirle tranquilidad -


Bueno, acá está todo listo, te vas a meter con corpiño sin nada en la parte de abajo sabes –



Junto con Marta, ayudamos a Pau a ingresar en la pileta y yo me senté al lado de ella, del lado de afuera.



Para el parto vas a acompañarla desde adentro?- dijo Marta sonriendo mientras colocaba la botella de agua de Paula a un costado y unas toallas por si quería salir –

Sí, es lo que quiero, espero que los médicos me dejen – sonreí –

Te van a dejar quédate tranquilo –

Bueno, yo los voy a dejar solos, cualquier cosa que necesitas me llaman por el botón rojo si? –

Gracias Marta – Paula sonrió mientras le sostenía la mano –

De nada querida, en un ratito igual pasó para controlar que todo vaya bien –

Mi amor avisaste que estamos acá? –

No no avise gorda, ahora me ocupo de avisar, quédate tranquila – sonreí – queres agua?

No gracias, por ahora no – coloco su nuca para atrás y cerró los ojos relajándose –



Habíamos ingresado minutos antes de las 18:00 hs y ya eran las nueve de la noche. El dolor de 
Paula iba en aumento y las contracciones también, cuando Agos la había revisado hacia una media hora aproximadamente su dilatación habían avanzado unos dos centímetros, por lo que nos encontrábamos en la mitad del camino.


En este momento se encontraba en la cama recostada, ya que había estado bastante en el agua y la había ayudado un poco.

Gordo alcánzame agua por favor –

Toma amor – mientras la ayudaba a tomar con el sorbete que había colocado en su botellita para facilitarle la acción –

Gracias… - mientras suspiraba – es increíble la presión que estoy sintiendo, cada vez mas

Eso quiere decir que cada vez falta menos mi amor, estas contenta? –

Estoy feliz pero dolorida – dijo riendo – pero sé que todo va a haber valido la pena cuando vea la carita de nuestro bebe

Estoy seguro que sí, no lo dudo. Sabes que te amo no? –

Lo sé, me encanta escucharlo y que me lo recuerdes todo el tiempo –


Permiso… volví – dijo Marta sonriendo mientras entraba con una pelota gigante –

Y eso? – dijo Pau sonriendo –

Es para vos Paulita, te va a ayudar, te enseñaron como usarla en el curso de preparto? –

Sí, nos enseñaron, pero Pau no cree mucho en que funcione –

Funciona, haceme caso y úsala, y si queres acelerar un poco la dilatación camina despacito aca por el pasillo –

Bueno voy a confiar en vos Martita entonces, la voy a usar y después voy a caminar un poquito antes de volver a meterme al agua –

Bueno me alegra que confíes en mí, los dejo tranquilos, y recuerden que… -

Pero no la deje terminar, sonreí y complete su frase –  que si necesitamos algo te llamemos por el botón rojo –

Exacto – sonrió y dejo la habitación –



Luego de un rato de usar la pelota y sentir el alivio a pesar de las contracciones Pau decidió hacerle caso a Marta y caminar un poco por el pasillo.


Pero no logramos estar mucho, ya que las contracciones comenzaron a ser cada cinco minutos y el dolor de un momento a otro comenzó a ser más intenso.


No… no puedo más, necesito meterme en la pileta… ayy – mientras se agarraba de mi –

Tranquila amor, tranquila… veni que te ayudo –

Ayude a que ingrese en la pileta, la deje sola por unos instantes mientras me colocaba una bermuda de baño y volví con ella.

Luego de apretar el botón me senté detrás de ella metiendo mis pies en el agua.

Era lo único que podía hacer para sentir que la estaba conteniendo. Verla tan dolorida me partía el alma y hacia que me sienta impotente.







Se viene se viene... se esta haciendo desear. Gracias por todos los comentarios que me dejan.  


lunes, 25 de agosto de 2014

Capitulo 111



Cuenta Paula:


Casi dos meses habían pasado, y hoy me encontraba con una panza gigante pero hermosa, que no veía la hora de dejar de tener, para que nuestro bebe se haga presente y podamos tenerlo en brazos.

Hoy es sábado 4 de enero, y me encuentro cumpliendo los ocho meses y medio de embarazo. Hace quince días que estoy sin trabajar, por lo que paseo, descanso y me ocupo de la casa.



En este momento Pedro se encuentra durmiendo una siesta, ya que a la noche vamos a ir a la casa de sus papas, en donde también nos vamos a reunir con mi familia a comer un asado.


Hoy mi panza se encuentra más baja que ayer, y las contracciones se están haciendo más frecuentes. Desde que me levante que siento que hoy es el día, pero decidí no decir nada para que PP no se ponga nervioso.


Finalmente elegimos el parto bajo el agua, que se llevara a cabo en la clínica, ya que durante todos estos meses, nuestro bebe logro relajarse y yo también cada vez que nos sumergimos en el jacuzzi.
El agua me ayudo muchas noches a calmar sus pataditas, mis dolores de pierna y cintura.


Luego de poner una carga de lavarropa decidí acostarme junto a PP en la cama para intentar dormir una siesta.


El intento de siesta fue inútil ya que durante una hora sentí contracciones cada quince minutos. Fue imposible concentrarme sola y no me quedo otra que despertar a Pedro.



Mi amor tenemos que ir a la clínica, cada vez son más intensas no podemos quedarnos acá, es mejor estar allá, que estés tranquila sabiendo que tenes todo el equipo conteniéndote –

Es…tas vos amor – tome su mano fuerte ya que venía la quinta contracción –

Mi amor se acabó – dijo colocando un beso en mi frente – nos vamos a la clínica

No me dejes sola por favor – lo mire mientras veía que se dirigía al vestidor –

Me cambio y nos vamos, no estás sola gorda, estoy con vos –



Vi cómo se terminaba de vestir rápidamente frente a mí y agarraba los bolsos.


Veni que te ayudo – dijo tomándome la mano – vamos a ir despacito hasta el auto sabes

Avi…sale a Luciano y Agos por favor, no quiero que me atienda otra persona –

Respira profundo y concéntrate, quédate tranquila que les avise recién antes de vestirme, vos ocúpate nada mas de intentar controlar el dolor que yo estoy con vos – acariciaba mi espalda, mientras tomado de mi mano íbamos caminando despacio hasta la puerta del departamento –



Al llegar a la clínica Agos se encontraba en la puerta esperándonos. Pedro se bajó del auto y dio la vuelta, para abrir la puerta y ayudarme a salir.


Mi amor despacito, tranquila –

Mmm espera, otra contracción – cerré los ojos ya que al momento de la contracción también sentí un líquido tibio correr por mis piernas -

Pau, acabas de romper bolsa – mirándome – lo sentiste?

Si, y una contracción muy fuerte – agarrándome de su brazo y del de Pedro –

Mi amor tranquila que va a estar todo bien – mientras me sonreía y besaba mi mano –

Cada cuanto son las contracciones – Agos –

Cada 15 minutos aproximadamente –

Si… - dije como pude para afirmar lo que Pedro decía, ya que cada vez sentía más presión –

Hace cuanto que las estas sintiendo – dijo Agos mientras me ayudaba a sentarme en la silla de ruedas –

No… se… como dos horas –



Luego de ponerme una bata y acostarme, Luciano me hizo una ecografía para controlar la posición del bebe, en donde claramente se veía que estaba colocado en el canal de parto.

Agos me reviso y comprobó que ya estaba dilatando, y mi trabajo de parto había comenzado.


Estaba dilatada en 3, por lo que decidieron dejarme internada para tener un mejor control, teniendo en cuenta que ya había roto bolsa.






Se vienee el nacimiento... Espero que les guste el capitulo. Solo quedan 9.
Gracias por todos los comentarios que dejan en cada capitulo. 

viernes, 22 de agosto de 2014

Capitulo 110



Cuenta Pedro:


Nuevo día, al sonar el despertador me levante, y mientras Pau dormía me metí a duchar para luego prepararme para ir a la clínica con ella a ver a Martin y después dirigirme a trabajar.


Mientras terminaba de colocarme la corbata sentí como Pau se abrazaba a mí.

Buen día papa hot –

Papa hot? – Reí – no me robes la idea, que es mía, yo era papa en proceso no me cambies el nombre mi amor – gire y la abrace dándole un buen beso en los labios – buen día

Buen día mi amor, como dormiste? –

Muy bien, los masajes tuvieron efecto prolongado –

Me alegro entonces, así vas relajado ahora a la consulta, de ahí te vas directo al trabajo? –

Si, tengo una reunión con Hernán y unos clientes, y me vengo para casa, la verdad que el ver nublado me tiene un poco mal, me hace mal estar frente a la compu y leer, voy a esperar tener los anteojos provisoriamente para seguir con los planos y proyectos que tengo, porque si no me agarra dolor de cabeza, ayer a la tarde intente y después me arrepentí, porque sonreís? –

Me alegra verte así –

Así cómo? –

Así, dándote cuenta cuáles son tus prioridades y cuidándote a vos mismo –

Me lo enseño una mujer muy hermosa, no te pongas celosa – reí –

No para nada – sonrió besándome el cuello – me voy a dar una ducha y nos vamos

No srta, primero vamos a desayunar, yo ahora preparo algo mientras te bañas, hace todo tranquila –



Mientras se duchaba, calenté el agua para el mate, y aprovechando que tardaba rápidamente prepare unos pocos panqueques con dulce de leche.

Coloque todo en la isla de la cocina y prendí la tele bajita con el noticiero de fondo.


Ya estoy lista mi amor – ingreso Pau sonriendo y se sentó a mi lado – mmm que rico olorcito de dónde viene?

De acá mi amor – reí – de los panqueques que están adelante tuyo, esta despistada

Si un poco – rio – se ven muy ricos, gracias gordito – beso mis labios –

De nada amor, desayunemos así vamos a ver a Martin y hacemos todo, yo igual estoy con tiempo porque la reunión es a la una de la tarde –



Al llegar a la clínica, tuvimos que esperar unos minutos ya que Martin estaba atendiendo un paciente.


Bueno chicos pasen – dijo Martin acercándose mientras sonreía – cómo andan? Como estuviste Pedro?

Bastante bien, cuando llegamos a casa descanse un rato y por suerte después se me paso el dolor de cabeza que tenía –

Quédate tranquilo que no es nada, te duele porque estas forzando la vista como te dije ayer –

Si por suerte descanso y estuvo mejor – Pau –

Bueno PP veni sentate acá y ponete estos anteojos – mientras los sacaba de un maletín –

Son horribles – dije riendo –

Si son feos amor, pero te va a ir poniendo vidrios hasta que veas perfecto para saber el aumento que te tiene que dar –

Exactamente eso es lo que voy a hacer – sonrió Martin – que mujer conocedora, es medica? – rio –

Que gracioso no? – rio Paula –



Luego de taparme el ojo derecho y medirme y repetir el procedimiento con el izquierdo Martin me hizo la receta para poder ir a la óptica y encargar los anteojos y los lentes de contacto.


Mi amor, acá en la esquina hay una óptica, vas solo o queres que te acompañe? –

No amor, veni conmigo no me dejes solo, así me ayudas a elegir el marco –

Bueno dale vamos, total – mientras miraba la hora – tengo media hora antes de empezar a trabajar


Elegimos juntos unos marcos negros y encargamos también los lentes de contacto.

Los anteojos por suerte estarían para mañana a la tarde y los lentes de contacto para dentro de una semana.

Después de despedirnos con Pau, me dirigí a visitar el local de Ale y Mama, estuve un rato con ellas y a las doce y media del mediodia me encontré con Hernán y los clientes en la empresa.

De allí fuimos a un restaurante, hablamos de negocios en el almuerzo y en el postre logramos cerrar el contrato que ya habían preparado los abogados de la empresa para este proyecto.


Al llegar a casa me di una ducha y me recosté a mirar un poco de tele, mientras esperaba a que llegue Pau de trabajar.








Espero que les guste el capitulo. Gracias por todos los comentarios que dejan capitulo a capitulo. Quedan solo 10 y llegamos al final de esta historia.  

martes, 19 de agosto de 2014

Capitulo 109


Cuenta Paula:

Ya más tranquilos, después de la consulta con Martin, nos dirigimos a casa.

Mientras él hablaba con Hernán, indicándole unas cosas para que haga debido a su ausencia, que eran necesarias, me dirigí al baño y agarre mis aceites y cremas que utilizaría para relajar a Pedro.


Mi amor!! Ya corte, seguís en el baño? –

Acá estoy gordito – sonreí sentándome en la cama –

Que es todo eso? – rio –

Aceites y cremas que te van a relajar, y vas a quedar como un bebe – sonreí –

Todo eso me vas a poner de verdad? – volvió a reír –

Si, sácate la remera dale –

A vamos directamente a los bifes –

Alfonso, dale no te hagas el vivo –

Ufa, está bien, tenía la ilusión… de … -

De qué? – reí –

De que aparte de los masajes me hagas mimitos –

Los masajes son un mimo –

Yo decía algunos mimos más gordita –

No era que te dolía la cabeza? –

Eso es excusa de mujer – dijo riendo y acercándome a él para besarme –

Que bobito sos mi amor – lo bese – son solo mimos a través de los masajes ahora amor, porque después voy a hacer el almuerzo así comemos temprano, porque me tengo que ir de acá una y media

Está bien… me voy a conformar amor –



Después de una buena sesión de masajes se quedó absolutamente dormido, lo que me permitió aprovechar el tiempo y preparar un almuerzo.


Cocine unos medallones de pollo, y unas papas fritas caseras. Coloque todo en la mesa del comedor y me dirigí a la habitación para despertarlo.

Para mi sorpresa no se encontraba en la cama, sino que se escuchaba la ducha.
Entre al baño despacio y justo se estaba metiendo.

Mi amor – sonreí – te despertaste

Si gordita, recién, me recontra relajaste con esos masajitos, gracias –

Ya está la comida lista, así que cuando salgas de ducharte te espero en la mesa –

Dale amor –

Te sentís mejor? Te duele menos la cabeza? –

Si, por suerte se me paso –

Seguro fue el susto que no veías bien, los ojos ya no los sentís duros no? –

No – sonrió –

Bueno, te dejo tranquilo, te espero en el comedor –


Estaba cerrando la puerta cuando escuche que gritaba mi nombre.

Que pasa amor?  - volví a entrar –

Que te amo mucho –

Yo también PP – sonreí y me retire –



Unos diez minutos más tarde sentí su beso en mi cuello.

Acá estoy mi amor, perdón por tardar, espero que no se haya enfriado –


No amor, no se enfrió quédate tranquilo, hice esto porque era algo rápido, así podíamos comer juntitos antes de irme –

No te justifiques gorda, porque me encanta esto de verdad – dijo sonriendo –

Que haces en cuero? – reí –

Tengo ganas de provocarte un poco – dijo acariciando mi mano mientras se reía –

Alfonso que malo estas hoy eh –

Yo malo? Nada que ver gordita… mmm que rico esta esto –

Es para hacerme sentir bien? –

No mi amor, de verdad esta riquísimo me encanta –

No, no hablo de la comida –

Y de que hablas? No entiendo… - mientras dejaba los cubiertos y me miraba –

Esto que haces… que haces que tenes ganas de estar conmigo –

Espera, espera un poquito amor – corrió su silla de la mesa para acercarse a mí con ella – explícate mejor porque no estoy entendiendo

Que te haces el que tenes ganas de estar conmigo, el que tiene ganas de hacer el amor –

No me hago nada, lo siento de verdad, quiero estar con vos, me encanta estar con vos –

No me mientas Pedro –

No te miento Paula –

Estoy horrible, ya estoy redonda, lo haces para que no me sienta mal –

Mi amor, mírame  - mientras agarraba mi barbilla y me acercaba a su boca – podes pesar 200 kilos que a mí no me va a importar, yo amo a la Paula flaca, gorda, triste, contenta, malhumorada, embarazada y no embarazada, mírame bien, yo te amo a vos en todas tus formas y estados, no dudes nunca, pero jamás de eso. Te amo con mi vida entera

Yo también te amo mi amor, pero te mereces algo mejor –

Vos sos lo mejor que tengo, vos y nuestro hijo que viene en camino, te amo en este estado, quiero que te sientas la mama hot – mientras me sonreía – te amo mi amor… te amo mucho – mientras me besaba sus manos viajaban de mi cintura a toda mi espalda, dándome suaves caricias –




Luego de unos minutos de mimo, terminamos de almorzar, y muy a mi pesar me tuve que despedir de el por un rato, para ir a la clínica y cumplir con mi horario laboral. 






Bueno un poquito de bipolaridad faltaba ya no? jajaj espero que les guste el capitulo. Pueden comentar aca o en tw. 
Nos leemos con el proximo capitulo el viernes. 

lunes, 18 de agosto de 2014

Capitulo 108



Cuenta Pedro:


No podía creer lo que me estaba pasando. Me había despertado después de vivir un hermoso cumpleaños el día de ayer, y toda la felicidad que tenía y el sol que sentía en mi vida, se había nublado.

Al abrir los ojos me di cuenta que mi visión no era como la de ayer, estaba viendo mal nuevamente. Mi mundo comenzaba a partirse en miles de partes.

Trate de tranquilizarme, y me dirigí lentamente al baño, prendí la ducha pero un fuerte mareo en conjunto con un fuerte dolor de cabeza hizo que me sentara en el inodoro.

No pude evitar largarme a llorar, sentía miedo, frustración, miles de cosas a la vez que no podía controlar.


Pero como siempre, Paula apareció para salvarme, me contuvo, y me tranquilizo.

Luego de vestirnos, y desayunar, obligado por ella, ya que yo no tenía las mínimas ganas de hacerlo, nos subimos a su auto y nos dirigimos a la clínica.



Al llegar fuimos directamente al consultorio de Pau, y ahí ambos esperamos a Martin.

Estaba abrazado a ella cuando escuchamos que alguien llamaba a la puerta.

Se puede? –

Si, pasa Martin – dijo Paula mientras se levantaba de mi regazo –

Buenos días… permiso chicos –

Hola Martin – dije algo serio –

Buen día Pedro, hola Pau – nos saludó a ambos – que anda pasando?

No te conto Paula? –

Sí, me dijo algo, pero quiero saber que sentís vos… veni sentate acá que te voy a mirar con el aparato –

Nada, no hay mucho para decir, estaba todo bien, y cuando me desperté me di cuenta que veía nublado, quise bañarme pero sentí un mareo y me agarro bastante dolor de cabeza –

Bueno tranquilo…  tira la cabeza para atrás y mira para arriba que te voy a poner unas gotitas –

La verdad que se puso muy mal y yo me puse nerviosa, por eso te avise a vos, porque no quería revisarlo yo –

Está muy bien lo que hiciste Pau –

Bueno Pedro mira acá a mi derecha, fijo a mi dedo… muy bien ahora acá a la izquierda… seguí mi dedo –

Siento un poco duro los ojos, que me pusiste –

No despegues la pera de ahí, te puse gotitas para tomarte la presión ahora te voy a apoyar esto, ya lo hemos hecho, por favor por nada te muevas, cualquier cosa me apretas la mano si? –

Si – dije algo nervioso, odiaba cuando me tomaba la presión –

Bueno, la presión esta perfecta Pedro, es normal esto que tenes sabes? Pensa que pasamos de no ver nada a ver perfecto, esto podía pasar –

Que me estas queriendo decir? –

Que no te preocupes y te tranquilices, mañana vas a venir más tranquilo y vas a mirar el panel, vamos a evaluar el grado de visión que estas teniendo y te voy a recetar anteojos –

Anteojos? –

Si, anteojos, si no queres podes usar lentes de contacto, pero lo más rápido que la óptica te va a hacer son los anteojos, así que provisoriamente vas a usarlos, y después podes usar los lentes de contacto –

Para siempre voy a tener que usarlos? –

No mi amor tranquilo, cuando corrijas la visión vas a poder dejar de usarlos –

Exactamente lo que dice Pau Pedro, así que amigo – palmeo mi mano – no te asustes que está todo bien –

Y porque no hacemos ahora lo de los anteojos, digo… así ganamos tiempo –

Mi amor las gotas que te puso hacen que veas más nublado, no puede hacértelo ahora –

Te espero mañana a la hora que puedas Pedro, yo estoy acá todo el día –

Bueno, mañana venimos entonces – sonreí un poco más aliviado – gracias por todo

No agradezcas nada, y fuera la preocupación porque es normal esto sí? –

Si, gracias –

De nada chicos, nos vemos –

Estas más tranquilo amor? – dijo Paula sentándose nuevamente encima mío una vez que Martin había salido –

Si mi amor, mucho más tranquilo, voy a ser un nerd con anteojitos por un tiempo – reí –

Vas a estar muy potro con anteojos, todas te van a querer robar –

Soy de ustedes mi amor, nadie me va a separar nunca de ustedes, epa hijo que movedizo –

Súper movedizo, me parece que el percibió que estabas tristón –

Estoy bien hijo, fue solo un sustito – acariciaba su panza – te amo campeón

Y él te ama a vos – sonrió Paula besándome – bueno volvemos a casa?, yo tengo que venir a 
trabajar pero a las dos de la tarde entro

Si mi amor, vamos, ahora voy a llamar a Hernán y le voy a pedir que se ocupe de algunas cosas importantes que si o si se necesitaban para hoy –

Ahora cuando lleguemos a casa, después de que hables con él, te vas a recostar tranquilo y te voy a  hacer unos masajitos para que te relajes, queres mi amor? –

Me encanto tu propuesta –







Espero que les guste el capitulo, pueden comentar aca o en tw si quieren.




miércoles, 13 de agosto de 2014

Capitulo 107



Cuenta Paula:

La mañana me sorprendió con un sol brillante ingresando por el gran ventanal de la habitación.

Al parecer la noche anterior después de abrir los regalos junto a Pedro, la distracción de hacernos mimos y pasar un rato increíble antes de dormir, nos hizo olvidarnos de cerrar el cortinado.


Gire para ver a Pedro a mi lado, pero él no se encontraba en la cama.

Mi amor… te estas bañando? –


La ducha se escuchaba desde el vestidor, así que di unos pasos más para ingresar ya que seguramente no me escuchaba.


Mi amor, hace mucho te levan... ey gordo que pasa? –


Al ingresar no se estaba bañando,  solo la ducha estaba encendida y él se encontraba sentado en el inodoro con la cara entre sus manos.

Mi amor estas bien? – mientras me agachaba a su altura -

Solo escuchaba que lloraba, y estaba empezando a preocuparme.

Mi amor háblame, que te pasa? –


Saco sus manos de la cara y me abrazo colocándose en mi hombro.

No me asustes gordito, que te pasa mi amor, decime algo –

Veo mal… veo mal Pau – mientras lloraba en mi cuello y mi cuerpo se tensaba –

Tranquilo amor, decime concretamente que es lo que sentís –

No veo bien, veo borroso, te veo borroso amor – lloraba desconsolado y yo intentaba calmarlo con mis caricias –

Tranquilo, no llores así, cálmate, a mí me ves borroso? Mírame –

Si un poco – mientras intentaba calmarse y secaba sus lágrimas –

Te duele la cabeza? O solo ves borroso? –

Sí, me duele un poco –

Tranquilo, ahora vas a vestirte y vamos a ir a la clínica así te mira Martin, no te quiero revisar yo, porque estas nervioso, y queriendo contenerte me pongo mal, él va a ser más profesional mi amor, trata de tranquilizarte –



En silencio, salió del baño y se colocó un jean y una remera escote en V, se lavó los dientes y luego se sentó en el borde de la cama a esperarme a mí.


Lo más rápido que pude me vestí y me dirigí a la cocina, prepare café para ambos y unas tostadas que unte con dulce de leche y lleve la bandeja a la cama.


Mi amor no te enojes pero no quiero desayunar – dijo viéndome mientras ingresaba con la bandeja –

Vas a desayunar sin ganas, no me importa – acaricie su cara – quédate tranquilo que no es nada seguro, que veas así no quiere decir que vas a volver a lo de antes mi amor, es normal que pase, es reciente la operación


Sin contestarme nada, tomo su café y comió una tostada, al terminar lleve todo a la cocina y lo llame desde el living.

Mi amor veni que ya nos vaamoos, o necesitas ayuda?? –

A los segundos el apareció mirándome.

Veo nublado Paula, no estoy ciego de nuevo – dijo algo enojado –

Pedro, te pregunte bien para ayudarte, porque me hablas así? –

Porque me estas tratando como ciego, no quiero que me trates así –

Amor háblame bien, lo hice porque estas nervioso y no quiero que estés mal, era para ayudarte, tampoco para que me trates así –

Me dedico una mirada un tanto llorosa, pero no emitió sonido alguno.

Ambos bajamos y luego de subir al auto, nos colocamos los cinturones y el con su cabeza contra la ventanilla cerro los ojos.


En silencio me limite a emprender el camino a la clínica para no ponerlo más nervioso.


Al llegar, nos dirigimos a mi consultorio y le envié un mensaje a Martin para que cuando se libere se acerque a nosotros y lo pueda atender tranquilo.

Mi amor estas bien? Te sigue doliendo mucho la cabeza? – mientras me acercaba y acariciaba una de sus piernas –

Si, la verdad que sí, me duele bastante –

Ahora va a venir Martin y te va a revisar, ya le avise que estamos acá –

Me das un beso? – Dijo mirándome un tanto triste –

Todos los que quieras pero cámbiame la cara –

Estoy un poco asustado, y arrepentido –

Arrepentido de que gordito? –

De haberte tratado tan mal, no te lo merecías –

Es entendible porque estas nervioso, te amo y nada de lo que me digas va a cambiar lo que siento –


Tome su cara y lo bese, para luego sentarme en sus piernas y colocar su cara en mi pecho para poder transmitirle tranquilidad.






Subi el capitulo 106 tambien,Espero que les guste. Pueden comentar aca o en tw si quieren.  




Capitulo 106



Cuenta Pedro:


Definitivamente me había llevado la sorpresa más grande en años al subir la escalera del lugar.
Paula se encontraba hermosa, con un vestido que hacia lucir a nuestro hijo  y resaltaba su belleza.

Detrás de ella me recibieron toda mi familia y amigos deseándome feliz cumpleaños.



Pero una de las cosas que más me sorprendieron junto con la organización de la fiesta sorpresa que había hecho Pau, fue el regalo. Ella, además de encargarse personalmente de la organización de la fiesta había comprado un auto para mí.



Luego de una hermosa tarde llegamos a casa totalmente agotados. Yo seguía sin salir de mi asombro por toda la tarde vivida.

Sr cumpleañero, nos duchamos juntos? Y después abrimos los regalos los tres? – dijo sonriendo mientras se sacaba sus zapatos en el borde de la cama –

Me encantaría mi amor – sonreí –


Mientras ella preparaba todo en el baño, saque mi ropa, y me coloque una toalla envolviendo mi cintura.

Al entrar el vapor se había apoderado de la habitación y ella se encontraba concentrada colocándole sales al agua. La sorprendí por detrás abrazándome a su panza.


Ya estoy listo mi amor –

Ay PP!! – Dijo riendo – me asustaste

Porque te asuste? Quien te va a abrazar así en casa? – reí y bese su cuello –

Nadie bobo, pero estábamos concentrados preparando todo –

Esta todo perfecto, es hora de sacar este vestido – mientras besaba su nuca –

Mm si? Y si me meto así? – dijo riendo –

Mm no… no es una opción, digamos que… lo pido como parte de mi regalo de cumpleaños –

No te alcanzo la tarde que tuviste y el auto? – mientras me reprochaba en forma de chiste –

No, no alcanzo, quiero mimos de mi mujer y de mi hijo –

Sus deseos son ordenes – dijo quitando el vestido –


Una vez desnudos, nos sumergimos en el agua, ella delante de mí y yo por detrás mientras masajeaba sus hombros y cuello.



No tenía que hacerte mimos yo? –

Mmm me gusta hacerte mimos – sonreí y la bese – me relaja

No te relajarías mas si yo te hago masajes? –

También, pero me gusta más cuando usas tus aceites y cremas –

Ah metrosexual lo tuyo amor – rio –

Nada que ver, no digas eso que nuestro hijo se va a pensar que soy gay –

Hijo quédate tranquilo que papa no tiene absolutamente nada de gay mi amor – mientras se acariciaba la panza dulcemente –

Paula! – Reí – no digas así –

Te crees que él no sabe que no sos gay mi amor?, el siente todo –

Todo todo? – reí –

Si, siente todo todo el amor que nos tenemos, no tengas dudas de eso –

Te amo sabias? –

Si, lo sabía pero me encanta escucharte decirlo. Cambiando de tema, seguro que te gusta el auto no? Sino vemos y lo cambiamos –

No mi amor, no lo quiero cambiar, me encanta. Aparte es bien espacioso para llevar todas las cosas del bebe, el cochecito va a entrar perfecto –

Te escucho entusiasmado amor – giro despacio para abrazarse a mí y depositar un beso en mis labios –

Estoy entusiasmado porque aunque no me creas, lo primero que mire del auto, no se si te llegaste a dar cuenta, fue el baúl –

No no me di cuenta de eso gordito – mientras acariciaba mi pelo –

Si, fue lo primero que mire, porque ahí es donde va a estar todo lo de nuestro bebe amor, tiene que ser amplio para que podamos meter todos nuestros bártulos para ir y venir – reí imaginándome la situación –

Tenes razón, en unos meses no vamos a poder salir rápido, todo vamos a tardar el doble – rio –

Al principio, después vas a ver que vamos a tomarle la mano, y vamos a salir re cancheros, no hijito? – Bese su panza – no veo la hora de que estés en nuestros brazos, disfrutando de un baño así familiar

Quedan pocos meses mi amor, vas a ver que se nos va a pasar rapidísimo, y vamos a estar así juntitos muy pronto –



Al Salir ambos nos colocamos nuestra ropa de dormir absolutamente relajados, y nos sentamos en la cama para comenzar a abrir los regalos.


Están locos mi amor, son un montón de regalos – sonrió abriendo el primero – creo que los paquetes doblan la cantidad de invitados, no sé porque tanto

Porque te quieren mi amor, y como pueden hacerlo, te llenan de regalos que es la forma de mimarte también en este día –

Mira que hermoso este reloj – dije abriendo la caja que lo contenía – me encanta

Ese lo compro tu mama mi amor –

Como sabes? –

Primero porque tiene la tarjeta, y segundo porque la acompañe yo – rio –

No sabía nada que fuiste con ella –

Muchas cosas no sabes de toda esta semana – volvió a reír –

Como por ejemplo? … - la mire curioso –

Como por ejemplo que no trabaje todo lo que pensas… -

Sos muy buena actriz sabias? –

No, no lo sabía, pero después de esta semana de entrenamiento, sé que puedo postularme para alguna novela de Suar –

Ni loco te dejo –

Porque? – mientras me miraba con puchero y se acercaba a mi boca –

Porque nunca dejaría que otro bese estos labios –

Te amo –

Y yo a vos mi mama hot y actriz –






Lean el siguiente.

lunes, 11 de agosto de 2014

Capitulo 105


Cuenta Paula:

Desde el momento cero de este día mis nervios aumentaban con el paso de los minutos.

Mi plan había comenzado hacía ya varios días, haciéndome la tonta con Pedro, para que crea que no me acordaba de su cumpleaños, pero no estaba sola en esto, Federico y Hernán me habían ayudado mucho.

Toda la familia e incluida la secretaria de PP me habían ayudado a que este día sea especial.

A las doce de la noche me había hecho la dormida y a la mañana me había ido antes de que el despierte, ya que no me aguantaría no saludarlo sino.


Al llegar al lugar que había reservado, llamado “El buen aire” mi mama y la mama de Pedro ya se encontraban ahí, colocando todo lo que habían preparado para la mesa dulce, lo que me sorprendió, ya que la reserva incluía todo.


A media mañana llego el agente para entregarme el regalo de Pedro, el cual era muy importante para él, y ni se imaginaba que hoy lo recibiría.


Todos los amigos y familia de Pedro ya se encontraban en el lugar, junto con mi familia. La música sonaba de forma suave, ya que abajo el lugar estaba funcionando para el público normalmente.

Mi teléfono sonó, y la secretaria de Pedro me aviso que el ya estaba en camino.


Escondida, mirando por la ventana pude ver como Pedro ingresaba al lugar, y mi corazón se paralizaba.


Avise con voz baja que estaba por subir y todos se amontonaron para poder recibir al cumpleañero de forma sorpresa.



Apenas comenzó a subir la segunda escalera me acerque sonriente y de fondo con un tono alegre se escuchó – Sorpresa!!! –



Sus ojos se abrieron como platos, su cuerpo por un segundo se tensó, quedándose quieto a tres escalones míos y luego, una amplia sonrisa apareció en su rostro, terminando de subir la escalera y tomando mi mano suavemente para acercarme a su cuerpo.


Feliz cumpleaños mi amor – dije sonriendo mientras depositaba un beso en sus labios –

Que malita y mentirosita resultaste – rio y acariciando mi panza me devolvió el beso –



Toda la familia y amigos lo saludaron mientras intercambiaban algunas palabras y luego volvió a unirse a mí.

Que es todo esto amor? Estas loquita – dijo riendo –

Perdón por hacerme la tonta todos estos días –

No pasa nada mi amor, me hicieron todos sufrir un poquito, pero valió la pena, es lindo ver a todos unidos acá para festejar este día conmigo –

Te amo –

Y yo a vos gordita –




Luego del gran almuerzo, mientras todos disfrutaban la mesa dulce, me pare de mi silla, me dirigi a la mesa donde se encontraban algunos compañeros de secundaria de Pedro, que con ayuda de Ana habíamos podido encontrar y me acerque a su oído.

Mi amor, te necesito por unos minutos –

Paso algo amor? –

No nada – sonreí – te quiero dar tu regalo, chicos se los robo por unos minutos –



Donde estamos yendo? – rio al ver que lo arrastraba casi por la escalera –

A darte tu regalo amor, no seas ansioso –

Gorda, de verdad donde me llevas – dijo abrazandome por la cintura –

Aca… - dije frenando en la esquina frente a un auto –

No entiendo, que hacemos aca en la esquina amor? –

Otra vez amor? – rei – darte tu regalo

No… estaría entendiendo – beso mis labios –

Toma mi amor – saque unas llaves del bolsillo con un llavero que tenía la última ecografía que habíamos hecho –

Esto…? –

Si mi amor, este auto que estás viendo es mi regalo para vos –

Estas loca, me compraste un auto Paula? –

Si, estoy loca, y si te compre un auto – reí – te lo mereces, no quiero que uses más el mío

A mí me gustaba usar el tuyo, no tenías que gastar estás loca –

Loca de amor por vos, es un regalo de los dos – lo bese colocándole la mano en la panza, para que sienta como nuestro hijo se movía – abrilo dale


Le saco la alarma, abrió del lado de acompañante y se subió del lado del conductor. Miraba cada detalle sonriente sin dejar de sorprenderse.


Yo estaba feliz viéndolo feliz, era todo lo que necesitaba.

No dejaba de agradecerme, y aunque al principio había estado un poco reacia con el tema del manejar, sabía que era algo necesario para el, para poder manejarse más fácilmente, y para que no se sienta pendiente de mí.



Luego de unos besos y sacarnos una foto juntos en el auto nos dirigimos nuevamente a la fiesta para poder brindar y terminar la tarde en familia.





Este capitulo esta dedicado a las que dudaban de mi bondad, osea a TODAS las lectoras de la novela jaja. 

viernes, 8 de agosto de 2014

Capitulo 104



Cuenta Pedro:

Día agitado... llegar a casa y escuchar silencio. Tirarme en el sillón, sacarme los zapatos, tirar la cabeza para atrás para descansar el cuello y cerrar los ojos junto a un largo suspiro.

Eran las 20:00 hs del día 8 de octubre. En apenas algunas horas comenzaría mi cumpleaños. Pero Paula no se encontraba acá, Hernán ya se había ido de viaje. Federico estaba en la suya, y mis viejos parecían también estar muy ocupados ya que ni una llamada de ellos había recibido en el correr de estos días.

Le mande un Wapp a Pau para avisarle que ya estaba en casa y luego me metí a bañar.

Al salir de la ducha me coloque mi pantalón de pijama y me dirigí a la cocina, al sentir el olor y escuchar el ruido que provenía de ahí.


Mi amor - sonrió acercándose - por fin saliste de la ducha - rio y coloco sus manos en mi nuca para luego depositar un beso en mis labios -

Hola amor, por fin vos llegaste - sonreí y acaricie y bese su panza - como están?

Súper cansados... pero felices de estar acá con papa - me abrazo por la cintura - estoy preparando la carne picada, ya puse a cocinar el puré

Mmm pastel de papa hoy? -

Si mi amor, no tenías ganas de comer eso? - mirándome apenada - hago otra cosa eh

No amor ni loco, hay un olorcito que ya me dio hambre – 

Bueno, si queres anda poniendo la mesa, que yo ya lo armo y lo pongo en el horno con quesito para que se dore queres? –

Dale mi amor, mm cada vez más tentador suena – dije riendo mientras la besaba –


Luego de cenar, Paula como si nada lavo los platos y se acostó junto a mí en la cama a mirar una película.

Cuando se hicieron las doce ella se encontraba dormida abrazada a mí. En ningún momento se despertó.

Conteste mensajes de compañeros de trabajo que me saludaban por mi cumpleaños y luego enchufe el cargador al celular y lo deje en la mesa de luz para que se cargue.

Tape bien a Paula y apague el velador para dormirme.



A la mañana siguiente cuando desperté me lleve una gran sorpresa, Paula no se encontraba a mi lado. Solo vi una nota en su lado de la cama, que decía que la habían llamado por una cirugía de urgencia en un nene y se había tenido que ir.


Luego de tomar un café y comer unas tostadas con dulce de leche me dirigí al trabajo.
Al llegar mi oficina era un caos de papeles para firmar y proyectos para revisar.

No podía creer que nadie de mi familia me había saludado, no podía entender cómo se habían olvidado de una fecha tan importante mis hermanos, mis papas, mi mejor amigo… pero sobre todo no podía creerlo de Paula.


Trate de concentrarme lo más que pude para poder realizar la cantidad de cosas que tenía sobre el escritorio, y cuando estaba a punto de tomar el ascensor para irme a almorzar una de mis secretarias se acercó.

Pedro, Pedro… espera – dijo acercándose algo agitada – no te olvides de darle esta carpeta en el almuerzo a Feder…

A Feder?... – la mire extrañado –

No estas yendo a encontrarte con el? –

No, si no tengo ningún almuerzo de trabajo con el –

Como que no? No leíste la nota que te deje? –

No, no leí nada, como no viniste en la mañana a recordármelo? –

Perdóname, pensé que la habías leído, fue un error mío –

Esta bien, ya esta no pasa nada. Cuál es la dirección? –

Costa Rica al 200, se llama “El buen aire” el lugar, te va a estar esperando en… - dijo mirando el reloj – media hora

Bueno, entonces estoy bien con el tiempo. En un rato vuelvo, si llama alguien importante que me llamen al celular, y sino que te dejen dicho a vos –

Bueno, no te preocupes, nos vemos –


Luego de un tráfico insoportable llegue al lugar. Estacione el auto a la vuelta, ya que la zona se encontraba cargada de autos debido a la hora y luego de agarrar la carpeta baje del auto.

Al entrar me recibió un mozo, el cual al verme me indico que debía subir la escalera, ya que el señor Feder ya se encontraba en una mesa esperándome.


Por un lado estaba disgustado con mi secretaria por avisarme a último momento, aunque también fue un error mío no haber leído sus notas… y por el otro estaba “contento” por no almorzar solo el día de mi cumpleaños.







Espero que les guste el capitulo. Pueden comentar aca o en tw si quieren. Van quedando pocos capitulos, gracias por seguir la historia.

miércoles, 6 de agosto de 2014

Capitulo 103



Cuenta Paula:

Faltaban dos días para el cumpleaños de Pedro, y todo estaba saliendo a la perfección.

Aunque el sueño estaba cada vez más presente en mi rutina, bastante bien lo llevaba con mis seis meses y medio de embarazo.


Mi agenda de turnos esta semana era tranquila, y había logrado arreglar no tener que estar en la guardia oftalmológica, así que todo esto me ayudaba a preparar como quería la fiesta para mi amor. 
Pero eso no era lo que PP tenía entendido, ni de mí ni de todos los que lo rodeaban.



Luego de comer los ñoquis con salsa blanca y quedar completamente llena sin poder moverme, nos trasladamos al sillón con nuestras listas de nombres que teníamos seleccionados para nuestro hijo.


Bueno… - dijo Pedro sonriendo mientras abría una hoja que tenía doblada a la mitad –

Mostrame que tenes … - dije tratando de espiar mientras me le acercaba –

No srta… - rio – primero quiero que me digas cual te gusta más de los que tenes … yo los que más me gustan los tengo resaltados

Cuantos tenes amor? –

Diez, vos? –

Mmm a ver… 2, 4, 6…  seis en total –

Bueno te digo mi lista amor… -

Dale a ver –

Benjamín… Santino… Lautaro…Nicolás…Leandro…Thiago…Franco…Teo…Tomas…Lucas… , ahora decime los tuyos amor – sonrió mirándome –

Bautista, Thiago, Nicolás, Benjamin,Milo, Mirko –

Mi amor… - rio – Mirko?

Si que tiene de malo? – reí –

Me suena a perrito… -

Gordo!! – Reí – que decís?

No se… ese no me gusta ni de casualidad… -

Está bien, los que más me gustan los tengo marcados, pongamos las dos listas y vemos si coincidimos en alguno –


Al poner nuestras listas una al lado de la otra claramente teníamos en común Benjamin, Thiago y Nicolás.


Increíble como coincidimos de una amor, me da miedo – rio PP mientras me besaba el hombro –

Es todo un avance… podemos decir que estamos entre estos tres nombres entonces? –

Si – dijo PP acariciando mi panza – ya estamos más cerca hijo, encaminados por lo menos para decidir tu nombre

Nos vamos a acostar los tres juntitos? Próximamente decidiremos el nombre final –

Me parece que los tres nombres son muy lindos pero no puedo decidirme por ninguno – dijo ayudándome a parar del sillón – creo que cuando le veamos la cara vamos a saber cuál es su nombre 

Vos decís amor? – dije abrazándolo de costado mientras apagábamos las luces y nos dirigíamos a la habitación –

Si, mis viejos hicieron eso conmigo, estaban indecisos y yo cuando nací se ve que tenía cara de Pedro – rio –

Que tonto, no me cargues amor –

De verdad te digo, vas a ver pregúntale a mi Mama si no me crees –

Te creo, porque me lo estás diciendo serio, y creo que nosotros vamos a hacer lo mismo –

Estoy de acuerdo – beso mis labios y abrió las sabanas para que yo pueda acostarme – estas cómoda así? O te acomodo mejor los almohadones?

No, así estoy bien, ahora cuando te acuestes me voy a abrazar a vos igual – sonreí –

Con mucho gusto – se metió en la cama y me abrazo a mí y a la panza –



Ocho de octubre… día soleado… girar a mi derecha y ver dormir boca abajo a mi hombre, al padre de mi hijo… todo despeinado y con su olor tan característico.

Acariciarlo, y admirarlo dormido como cada día que despierto junto a él. Enamorándome día a día un poco más si es que eso es posible.


Hoy a las doce seria el cumpleaños de Pedro, y lo más difícil seria hacerme la tonta y no saludarlo.

No quería que se ponga mal, pero era el primer cumpleaños que yo le estaba organizando y quería que sea especial. Este sería el último solos, como pareja, el próximo seria ya como una familia.







Espero que les guste el capitulo. Pueden comentar aca o en tw.